El actual portador de la jineta de Los Cruzados ha levantado nueve títulos en su carrera y seis de ellos en Universidad Católica. Además es uno de los catorce jugadores Bicampeones de América. Con 34 años sueña con jugar muchas temporadas más, mientras se acerca a los 100 festejos en su carrera.
Comienza el segundo tiempo en San Carlos de Apoquindo. Igualdad sin goles entre La Franja y Universidad de Chile. Johnny Herrera despeja la pelota hasta el círculo central y es Germán Lanaro quien devuelve con un cabezazo. Duvier Riascos va a buscarlo. Antes, se cruzan dos defensores de la “U” y chocan en el aire. Le queda el balón a Carlos Lobos, sólo en tres cuartos de cancha. “Carlitos” controla con el pecho e inmediatamente visualiza al “Chapa” Fuenzalida entrando al área sin marca alguna. El público se pone de pie justo en el momento en que el capitán controla y rápidamente remata cruzado al segundo palo. Los Cruzados celebran con algarabía la apertura de la cuenta y el quinto tanto de José Pedro Fuenzalida en un “Clásico Universitario”.
ES UNA DE LAS COSAS IMPORTANTES QUE HE LOGRADO EN MI CARRERA
"Ser el capitán es un orgullo. Siempre he sido hincha, lo vi desde afuera y luego fui creciendo acá en el club. Es algo que me pone muy contento y que además trae muchas responsabilidades que uno tiene que asumir más allá de cosas fuera de lo futbolístico que son importantes, pero también lo tomo como un premio a la carrera que he realizado. Cuando uno es capitán significa que tiene una historia en el club y obviamente estar dentro de ese grupo me pone muy contento. Es una de las cosas importantes que he logrado en mi carrera. Cuando no estuve, mi sueño era volver, poder ser campeón y creo que se han logrado los objetivos. Hoy casi cuatro años después he logrado títulos y soy el capitán del equipo, cosa que obviamente me pone feliz".
SER EL EJEMPLO DENTRO DEL GRUPO ES ALGO QUE ME GUSTA
"Creo que durante toda la carrera uno está aprendiendo. Desde niño siempre estás viendo a los más grandes, aprendiendo día a día en la parte futbolística con los compañeros y entrenadores y a medida que pasan los años uno va adquiriendo experiencia. También trato de apoyar a los más chicos en ciertas cosas que también viví y así uno empieza a asumir otros roles. Lo mismo con los cuerpos técnicos, hay más cercanía, más conversaciones con los compañeros que somos más grandes. Se genera otro tipo de responsabilidades que se empieza a asumir. Me gusta ser ejemplo de cosas y lo tengo que ser en lo que le quiero pedir a un compañero. Ser el ejemplo dentro del grupo es algo que me gusta”.
ME MOTIVA EL HECHO DE JUGAR MUCHOS AÑOS MÁS
“Me gusta sentirme bien, me gusta disfrutar de los partidos y creo que para mí y por mi forma de jugar, para disfrutar de un partido necesito estar bien físicamente y eso también lo he tomado como un desafío. Me motiva el hecho de jugar muchos años más. Mantenerse bien, poder entrenar de la mejor manera para estar lo mejor posible y romper ese estigma que nosotros también teníamos, porque empezamos a jugar en una etapa donde a los 33 o 34 años los jugadores se retiran. El hecho de que a los 34 años ya está terminada la carrera, es algo que teníamos muy incorporado todos. Ha sido un cambio en los últimos años, la vida útil de los deportistas se ha estirado, la de los futbolistas llegan a los 37 o 38 años y mi idea es llegar. Obviamente hay muchas cosas entremedio, para eso tengo que estar preparándome siempre, poder mantener mi físico, que es lo que más me importa. Estando bien físicamente creo que puedo competir".
PUEDO ESTIRAR MI CARRERA BASTANTES AÑOS
"Siempre lo asumí, traté y me esforcé por estar bien físicamente, lo que pasa es que son entrenamientos distintos. El tema de la alimentación ha cambiado, hay muchas cosas que antes no sabíamos. Me habría gustado tener la información que tienen ahora los más jóvenes, hay mucha más en base a los entrenamientos, la recuperación y la alimentación. Todo eso hay que aprovechar porque antes no estaban, entonces creo que llegó en una etapa justa porque si no hubiera tenido ese cuidado durante los últimos años, hoy me costaría mucho más. Hoy puedo estirar mi carrera bastantes años más".
Desde su debut en La Franja en 2004 hasta su paso por Boca Juniors en 2015, el "Chapa" convirtió 54 goles, con un promedio de 4.5 tantos cada doce meses. Regresó a Universidad Católica en 2016 y en menos de cuatro años, acumula 31 festejos entre la UC y "La Roja". El capitán está muy cerca de alcanzar las 100 celebraciones en su carrera.
SENTÍ LA IMPORTANCIA DE HACER GOLES
"Durante toda mi carrera me interesó mucho el tema táctico. Aprendí a jugar en distintas posiciones y me importa mucho el funcionamiento, movimientos y coordinación del equipo. Eso lo encuentro más importante que uno querer hacer la jugada final o el pase final. Me parece que siempre dejar a un compañero o uno mismo estar en buena posición es importante, más allá de quien sea. Siempre lo he visto así y lo sigo viendo así, pero también creo que desde que estoy acá y me tocó jugar de delantero casi siempre, sentí la importancia de hacer goles. De no siempre jugar en base a movimientos sino que ser a veces más directos, ir a buscar un centro, llegar al área, irme por dentro, es algo que aprendí a hacer acá, que también es parte de los entrenadores. Cuando llegó Mario (Salas) siempre nos pedía la aparición en el área, entonces me tocó hacer bastantes goles. Después con Beñat (San José), me hizo jugar por dentro y también me ayudó porque aprendí a estar en otras partes de la cancha que no estaba acostumbrado. Al hacer goles se va abriendo ese apetito de querer hacer más por la repercusión que tiene. Ha sido un crecimiento y un plus poder estar más cerca del área y, más allá de hacer goles, de generar situaciones, me gusta perfeccionar en el día a día".
