Hoy es el décimo quinto aniversario de la obtención de la novena estrella de Universidad Católica, la que se dio en el Estadio Nacional ante Universidad de Chile, en una final que se dirimió a través de los lanzamientos penales.
El 22 de diciembre del 2005, Universidad Católica logró alcanzar una nueva estrella: el Clausura 2005, el que tuvo a Universidad de Chile como rival en una final que se definiría en los lanzamientos penales.
Hoy se cumplen 15 años desde ese día, donde los Cruzados alzaron un nuevo título, esta vez ante su clásico rival, en un Estadio Nacional repleto y con un emocionante desenlace.
El mejor equipo en la fase regular
Universidad Católica fue el mejor equipo de la fase regular. Jugados 19 partidos, obtuvo 49 puntos, encumbrándose a cinco unidades de su más cercano perseguidor, Colo-Colo y a 11 puntos de Universidad de Chile, que acabó en el tercer lugar. Es importante destacar también que La Franja en esta fase ganó 15 partidos, empató cuatro y no conoció de derrotas, por lo que llegó invicto a los play offs, habiendo convertido 33 goles y solo recibido tres.
Cuartos de final: Cobreloa
Semifinal: La Serena
Club Deportes La Serena fue el escollo en la semifinal. En una guerra de goles en el partido de ida, La Franja obtendría un empate a tres goles. Para Universidad Católica convirtió el Jorge Quinteros y Eros Pérez en dos oportunidades.
En casa el "Polo" Quinteros daría la tranquilidad, anotando con una espectacular contorsión en el aire que le daría el paso al partido de definición ante Universidad de Chile.
CAMPEONES ANTE EL CLÁSICO RIVAL
Los Cruzados definirían el Clausura ante Universidad de Chile en dos finales que se jugarían en el Estadio Nacional. En la ida, la Franja se llevaría la victoria con gol de Eduardo Rubio de lanzamiento penal, lo que le daría una ventaja para la vuelta.
En la segunda final, los Cruzados comenzaron en ventaja con gol de Alejandro Osorio. Pero en el segundo tiempo, un error arbitral le daría el empate a los azules. Marcelo Salas anotaría la paridad tras un centro de un balón que había abandonado el campo de juego y luego Diego Rivarola anotaría el 2-1, con el que la final se decidiría a penales.
En los lanzamientos desde los 12 pasos, la figura sería José María Buljubasich, quien contuvo el penal de Waldo Ponce, dándole así la inmejorable chance a Jorge Quinteros de sellar el título Cruzado. El "Polo" no fallaría, y convertiría el tanto con el que La Franja bajó su novena estrella.
