Cada 26 de marzo recordamos el nacimiento de una de las mayores leyendas de Universidad Católica. En esta nota repasamos parte de su legado con La Franja.
INICIOS Y PASO POR ARGENTINA
Sergio Livingstone debutó como arquero en 1938, con solo 18 años. Defendió el arco cruzado hasta 1943, cuando protagonizó una histórica transferencia a Racing Club de Avellaneda, convirtiéndose en capitán en su única temporada y siendo elegido el segundo mejor arquero de la liga argentina.
GLORIA CON LA FRANJA
A lo largo de 19 temporadas con Universidad Católica, el «Sapo», como le apodaban cariñosamente, dejó una huella imborrable. Fue el mejor arquero del Torneo Nacional en 1941 y el menos batido en 1948 y 1949. Defendió el arco cruzado en 675 partidos de liga y fue clave en la obtención del primer título nacional del club en 1949. También sumó las conquistas del Torneo Nacional de 1954 y el ascenso a Primera División en 1956.
En 1950, lideró a la UC en una histórica gira europea, logrando el Torneo Internacional de Pascua en España tras vencer al FC Saarbrücken y empatar con la Selección de Catalunya.
Se retiró el 19 de septiembre de 1954 en un partido con la Selección Chilena, venciendo 4-2 a Argentina en el Estadio Nacional, en lo que fue la primera victoria de Chile sobre la Albiceleste.
UNA FIGURA DE SELECCIÓN
Con la Roja disputó 52 partidos, incluyendo seis ediciones del Campeonato Sudamericano (hoy Copa América), lo que lo convierte en el futbolista con más presencias en esta competición. En la edición de 1941, celebrada en Santiago, fue elegido el Mejor Jugador del Torneo.
Además, fue capitán de Chile en el Mundial de Brasil 1950, siendo una de las figuras del equipo dirigido por Alberto Buccicardi.
UN LEGADO IMBORRABLE
En 2006, la IFFHS lo reconoció como el noveno mejor arquero sudamericano del siglo XX. Su legado quedó inmortalizado en 2009, cuando una tribuna de nuestro estadio fue bautizada con su nombre.
Tras su retiro, brilló como comentarista deportivo, dejando una marca en el periodismo tanto como en las canchas.
Sergio Livingstone falleció el 11 de septiembre de 2012, pero su nombre sigue vivo en la historia de Universidad Católica y del fútbol chileno.